4 hs en tren separan a Londres de la capital Escocesa. El viaje se hace ameno y apenas llegamos a Edimburgo recuerdo lo fascinante que es esta ciudad. Ya habia(mos) estado allí en 2000 por un fin de semana, pero esta vez le dedicaríamos 4 dias.
Llegamos al hotel en taxi, ya que no sabíamos el recorrido caminando... pero a la vuelta optamos por caminar porque está realmente muy cerca de la estación de tren.
El hotel elegido fue el Holiday Inn Express Royal Mile ... Excelente! Desde la atención, en especial la de Daniel el español de turno noche, la habitación, el desayuno...
Dejamos nuestras maletas y salimos a recorrer la ciudad.
Habiendo planeado todo, lo primero era acercarse al Museo de la Infancia y a St Giles Church que cierran a las 17 hs (ambos con entrada gratuita).
Un rápido recorrido por ambas y ya estábamos listos para cenar. Si, cenar a las 18 hs!!!
El sitio por recomendación fue The Mitre.
La comida es excelente y el ambiente de lujo.
Un bar adelante donde a toda hora se reúnen los colorados a tomar sus buenas pintas... Y un restaurante atrás donde nos sentíamos más a gusto con una beba de 20 meses ....
En ciertos horarios se puede comer un menu por 8 libras al mediodia o 10 a la noche. Incluye plato, bebida y postre.
Opcional por 1 libra más una pinta de Nicholson´s Scotish Ale!
¡A recorrer la ciudad!
Tras desayunar suculentamente salimos a recorrer la ciudad. Caminando por la mítica Royal Mile nos encontramos divinas fachadas y patios traseros o "backyards" escondidos que te dejan sin aliento. Cada paso era una foto, pasear por Edimburgo es como estar en un cuento antiquísimo.
Parlamento de Edimburgo
El Parlamento era nuestra primera parada.
El edificio moderno ya era muy llamativo. La entrada es gratis , se pueden visitar solo algunos pisos y si uno tiene suerte puede enganchar una visita guiada. Nosotros llegamos cuando ya terminaba la visita pero nos comentaron que si otro día queríamos hacerla, ellos tienen una nursery donde cuidan a los más chicos y donde podríamos dejar a nuestra hija. Pasamos a visitar ese espacio y quedamos sorprendidos: maestras, niños, pinturas, juegos, cambiador de pañales, zona para amamantar, todo tan prolijo ... Un lujo!Por dentro la visita fue corta y no pudimos acceder a todos los pisos porque empezaban a sesionar. La atención de todos es para destacar.
El controversial edificio
Esta fue la última obra del reconocido arquitecto catalán Enric Miralles.
El Parlamento buscó convertirse en símbolo de la identidad escocesa teniendo en cuenta el paisaje, la gente y su cultura.
Original y de gran calidad espacial el edificio se compone de varias partes interrelacionadas que parecen nacer desde la tierra.
Una de las cosas más impresionantes es el interior de la Cámara: es vidriada (permitiendo la relación directa interior-exterior) y con forma de hemiciclo (planta semicircular).
Estas dos cualidades la diferencian por oposición a la cámara del parlamento londinense (aislada y con asientos enfrentados).
No todo fue color de rosas
Apenas llegamos tuvimos un pequeño percance! Al entrar al edificio hay que pasar por una zona de seguridad con detector de metales, como en los aeropuertos. Mi marido llevaba una navaja adquirida en USA que la usábamos para pelar la fruta de nuestra hija o para cortar sus leches. Él la entrego tranquilamente pensando que era algo normal y no debería pasar nada ... Pero nunca imaginó que iban a querer detenerlo !!! Si, como lo leen. Un policía lo separó de nosotras y lo llevó a una habitación. Yo esperaba afuera sin entender junto a mi hija. Luego de unos minutos sale el policía y me dice que lo acompañe para hacerles de "traductora"; así que yo estaba para entender lo que el policía quería decir. Simple: ¡tener una navaja en UK es un delito! Por suerte, como mi marido la entregó voluntariamente y notaron que sólo éramos una familia de vacaciones, lo único que hicieron fue comprobar sus antecedentes y quedarse con la navaja para su destrucción.
Bueno...así fue como casi nos quedamos a vivir allá ....lástima, no? J
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